Ya está claro que el IVA de las bebidas azucaradas y edulcoradas va a subir del 10% al 21%. Sin embargo, restaurantes, cafeterías y similares, transporte de pasajeros, hostelería, libros y prensa, paquetes turísticos y jardinería también podrían contar con un IVA del 21%. Aunque el Gobierno no lo ha terminado de aclarar, esa mayor carga impositiva ha estado encima de la mesa.