El Sporting, plagado de bajas, busca seguir una línea competitiva ante un Granada con posibilidad de echar raíces en ascenso directo.

No es un encuentro cualquiera el del domingo en El Molinón. El Sporting, en condiciones precarias, maltratado por las lesiones y las sanciones, tiene la obligación de pelear la victoria y no verse más cerca del descenso con un equipo de auténticas circunstancias ante uno de los peores rivales: el Granada.

Cierto es que los de Paco López no están en su mejor momento de juego, aunque llegan en una racha de diez encuentros sin perder, pero con una motivación extra: la de poder echar raíces en el ascenso directo tras el empate el viernes del Levante.

El equipo gijonés llega tras salvar un punto, con mucha polémica, su visita al Estadio de Gran Canaria. La primera parte del Sporting en tierras insulares fue meritoria, de nota, pero un más que dudoso penalti en contra y la expulsión de Marsá, equilibraron el partido para los pío pío. Aún así, los de MAR sostuvieron un valioso punto y consiguieron una buena imagen a domicilio por segundo partido consecutivo.

En cambio, el conjunto de la andaluz llega ya asentado en los puestos de ascenso directo tras comenzar de forma fulgurante este 2023.

Sólo una derrota y dos empates en los tres meses de competición en lo que va de año hacen que el equipo sea aspirante a todo. La última victoria, también con polémica, ante el Real Oviedo fueron 3 puntos de oro para superar al Levante en la clasificación.