Sorpresa mayúscula la que se llevó una patrulla de la Policía Local de Sitges este jueves al mediodía, en la zona de la urbanización Quint Mar de este municipio del Garraf (Barcelona), cuando detectaron que un niño de 9 años estaba conduciendo un coche con su madre al lado, según han explicado desde el cuerpo en un comunicado.

Los agentes se percataron que una persona muy bajita estaba conduciendo el coche de manera errática y decidieron parar el vehículo. El colmo del surrealismo llegó cuando vieron que se trataba de un niño de solo 9 años de edad. La madre iba de copiloto y para hacerlo todo todavía mucho más peligroso, llevaba un bebé de pocos meses en la parte de atrás. El colmo.

La policía procedió a denunciar a la madre del niño, de nacionalidad lituana, por haber permitido que su hijo, de 9 años y evidentemente sin permiso de conducir legal en España, se pusiera al volante del automóvil.

Ella es la responsable del vehículo y el niño, por su edad, no puede ser acusado legalmente del delito contra la seguridad del tráfico.

Las excusas que la mujer dio a la patrulla de la Policía Local no sirvieron de nada. Aseguró que dejó el coche al niño, en una zona apartada, para practicar.

Toda la información del atestado de la denuncia contra la madre  y la versión de los dos policías que interceptaron el coche ha sido puesta en conocimiento de la Fiscalía de Menores, por si quiere actuar contra la madre por esta grave imprudencia.