Un doblete del mediapunta aúpa a los vigueses hasta el séptimo puesto después de conseguir cuatro victorias consecutivas.

Ely se lesionó en su rodilla izquierda.

Hace un mes el Celta era colista de LaLiga después de que Coudet debutara en el banquillo celeste. El conjunto olívico ya ofreció una buena imagen en el primer partido de la era Chacho ante el Sevilla, pero lo que está sucediendo a continuación es realmente histórico. El Celta ha escalado desde el último hasta el séptimo lugargracias a las cuatro victorias consecutivas cosechadas en las cuatro últimas jornadas de LaLiga, algo que no conseguía desde la etapa de Luis Enrique, con once goles a favor y sólo uno en contra. El Chachismo va camino de convertirse en religión en Vigo.

Esta vez el protagonista fue Brais Méndez, con un doblete. El mediapunta tuvo como socios a otros dos zurdos, Olaza y Aspas, que le sirvieron dos balones inmejorables para que perforara la portería de Pacheco. El primer tanto llegó a los 19 minutos, otra vez de cabeza como en la jornada anterior, al aprovechar un sensacional centro del lateral uruguayo. El Celta fue tan dinámico como en las últimas semanas, aunque no creó tantas ocasiones claras. Brasil volvió a intentarlo en la reanudación, con un disparo que despejó Pacheco. Inmediatamente después Joselu tuvo en su cabeza el empate, pero Rubén Blanco realizó una parada soberbia. A partir de ahí, el Alavés se convirtió en el dueño del encuentro, arrinconando al Celta cada vez más, pero sin generar grandes ocasiones.

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Cuando más sufría el equipo vigués apareció Aspas, quien se serenó dentro del área para servirle una asistencia inmejorable a Brais, que marcó el segundo a placer. El Celta continúa imparable de la mano de Coudet y ya apunta a Europa. El Alavés, por su parte, sufrió su segunda derrota consecutiva, aunque lo más doloroso sin duda fue la lesión de Ely en su rodilla izquierda. Parece grave. En las próximas horas se conocerá el diagnóstico.