El conjunto rojiblanco se dio un festín y apabulló a un Almería que se llevó un 4-0 en la primera mitad.

Tras el descanso no hubo reacción pese a los goles de Ramazani y El Bilal porque Iván Martín y Stuani también marcaron para los catalanes (6-2).

Son días de carnaval y Montilivi vivió su fiesta a medida. El Girona bailó y festejó a costa de un Almería de chirigota. Los rojiblancos fueron tremendamente superiores a un rival que no compitió y se marchó con un 6-2 incontestable. Los de Rubi se desangraron en los primeros 43 minutos, recibieron un justo 4-0, y los ‘olé’ no tardaron en aparecer en una grada que disfrutó de un Girona que sale catapultado hacia la zona tranquila de la tabla y mete en un lío al Almería, que podría acabar la jornada en puestos de descenso.

La inoperancia que mostró el Girona hace una semana en Cádiz se la trasladó a un Almería en el que los errores defensivos e individuales fueron un tiro en el pie. En el 8′ Castellanos, que no marcaba en Liga desde el 29 de diciembre de 2022, se sacudió la mala fortuna y arrancó el festín. Rubi poco, o nada, pudo hacer desde la banda porque el Girona fue un ciclón que electrocutó el duelo en el 35′. Tsygankov, que vivió su primera titularidad, hizo el 2-0 y en la siguiente acción tras sacar de centro, error de Mendes, conducción de Aleix García y asistencia a un Riquelme que mató a Fernando.

El 3-0 parecía suficiente, pero no para un Girona que olió sangre y no dudó en morder una vez más antes del descanso. La acción fue de videoteca, con un taconazo de Tsygankov para que Javi Hernández marcase a placer ante la fragilidad defensiva del Almería. Los catalanes apabullaron y ni echaron de menos un tanto (bien) anulado a Castellanos en el 25′. Ese 4-0 fue, junto al que le endosó el Athletic al Elche, la mayor goleada en un primer tiempo de esta Liga.

Pero el festival no se quedó ahí. Rubi ‘castigó’ con el cambio a Mendes, Samu, Baptistao y Embarba y uno de los ‘nuevos’, Ramazani, puso el orgullo con el 4-1. Lo cierto es que la segunda mitad apuntaba a monotona, pero ese tanto hizo despertar de nuevo a los de Míchel y en dos minutos, Iván Martín y Stuani, colocaron el 6 en el marcador. Ambos marcaron en los primeros balones que tocaban. Casi como El Bilal, que también quiso su dosis de protagonismo al firmar el 6-2 definitivo. Aunque fue imposible quitarle al Almería la máscara de villano y de héroe a un Girona que sella así su segunda mayor goleada en Primera tras el 6-0 que le endosó a Las Palmas en 2018.