Sin dar nombres, reclama un mayor grado de implicación. «Hay que aprobar la asignatura de cultura del esfuerzo, del sacrificio y el compromiso al escudo y ese día no fueron a clase. Vienen rivales sin complejos y con trabajo te empatan; se llevan victorias. La diferencia entre ellos y nosotros, es que vienen a jugar como si fuese una final. Y nosotros lo afrontamos como un partido más, se lo dije a Oujo: ‘Seguirás siendo el entrenador, la apuesta es clara y firme; pero debes tomar decisiones’. No podemos estar perdiendo el tiempo, y si esto no cambia, las tomaremos en enero. Las Palmas Atlético es el Madrid o el Barcelona de Tercera, si hay jugadores que no pueden estar aquí, les damos la baja y traer al que se lo merezca», valoró el principal ejecutivo sobre la depresión de la ‘vela chica’ y ese grupo de futbolistas con el gandulitis.
Tratamiento de estrellas sin resultados
Los jugadores del filial no hablan con la prensa y solo atienden al área de comunicación del club. La vela chica perdió la categoría el pasado curso y bajó a la quinta categoría del fútbol nacional ofreciendo una imagen lastimosa. Sin ser cuestionado directamente por el tema en la emisora oficial, estiró su argumentación sobre el asunto. Denuncia una huelga de talento. Brazos caídos en el Anexo.
«Estamos cumpliendo con nuestra filosofía, trabajamos con jugadores de la cantera. Es una labor capitaneada por Tonono. Pero esto no es como una nevera, que abres y sacas los yogures. No te están esperando a que te los comas». «Todo depende de las camadas, y por cierto, ahora estoy muy decepcionado con Las Palmas Atlético. No doy crédito a lo que estoy viendo, veo los partidos y son profesionales. Todos los del filial tienen un sueldo y se les da de alta en la Seguridad Social (…) No puede ser que siete se dejen el alma y dos vengan a hacer su partido. Están comprometiendo el sacrificio y esfuerzo del resto. El míster debe cortarlo cuanto antes».
Para Ramírez, no es un problema de Oujo. «El apoyo al entrenador es total. Fue líder con el C en Tercera, como no nos vale para ser líder con el filial en la misma competición. El problema no es el entrenador, es que hay jugadores que no merecen estar aquí».