Sigfredo Barros Segrera falleció este lunes, a los 75 años. Fue un notable cronista deportivo del Periódico Hermano Granma durante más de cinco décadas.
La muerte de un amigo no se acepta, y menos cuando se trata de alguien como Sigfredo Barros Segrera, notable cronista deportivo de este diario durante más de cinco décadas.
Licenciado en Cultura Física y Deportes y con amplio conocimiento en esta especialidad, fue acercándose a este periódico a través de la cobertura de varias disciplinas.
Rápidamente devino hombre de confianza en el departamento de Deportes. A él se le podía encomendar una nota o un análisis de cualquier especialidad, que, con celeridad y certeza, la ponía en la mesa del jefe. Su afición por las estadísticas lo fue acercando al béisbol, convirtiéndose en un redactor de primera clase, reclamado por la afición.
Su entrega se convirtió en una religión, pues muchas veces debía escribir dos trabajos el mismo día para igual número de ediciones que tenía el periódico. Alcanzó así una maestría en llevar a la población, además de las noticias, su conocida sección Mirones, donde hablaba de las cuestiones más diversas.
Por su calidad, fue enviado especial a competencias de béisbol y otros deportes, entre ellas, los dos primeros Clásicos Mundiales de ese deporte, campeonatos panamericanos y los Juegos Olímpicos de Beijing-2008. Esas coberturas lo llevaron a ganar premios y menciones en el concurso de la crónica deportiva de la Upec, José González Barros, además de ser siempre reconocido por el Inder.
Mereció el Premio Deportivo por la obra de la vida. Ostentaba las condecoraciones Mártires de Barbados y Félix Elmusa, y era militante del Partido. Llegue a sus familiares y amigos nuestras más sentidas condolencias.