El centrocampista coronó su gran partido con el gol de la victoria en el 78’.
El equipo andaluz sigue perdido y sin rumbo.
José Gomes tiene mucho trabajo pendiente.
Se resistió más de lo deseado en Las Gaunas, pero el Logroñés ya sabe lo que es ganar siendo equipo de Segunda. Y puede disfrutar del premio en plenitud porque fue mejor de principio a fin ante un Almería infame, que sigue buscándose a sí mismo y al que ya le han volado seis puntos en tres jornadas.
El primer héroe de Logroño en este nuevo periplo en Segunda es Andy, un todoterreno que aporta criterio y llegada al centro del campo riojano y que coronó un excelente partido con un gol que ya forma parte de la historia de la Unión Deportiva Logroñés. El rival, sobre el papel, era de enjundia. Un Almería plagado de fichajes y obligado a pelear por el ascenso a Primera. Pero ese estatus sólo figura hasta el momento en los papeles. Los de José Gomes han comenzado la temporada a contrapié y el técnico tiene muchos deberes por cumplimentar todavía.
El Logroñés cerró bien las bandas y desconectó a los mediapuntas del Almería. Ese fue el antídoto con el que los riojanos alejaron de su área al equipo de José Gomes, que vio pasar sin pena ni gloria los primeros 45 minutos. Los locales sumaron a su vigor y a su buen plan defensivo un par de ocasiones muy claras. Pero Leo Ruiz no tuvo su día. El colombiano asistió con el brazo a Olaetxea dentro del área en una jugada que acabó con gol de Andy posteriormente anulado y remató horrible en el 41’ a escasos metros de la portería y con todo a favor. Esas dos acciones dejaron al desnudo a Peybernes y Chumi, discretísimos centrales de emergencia ante las bajas de Cuenca y Maras, quienes sin estar en Las Gaunas vieron consolidado su rol de titularísimos.
José Gomes no esperó para intentar cambiar la inercia del partido y tiró de su fichaje estrella, Sadiq, en el descanso. El resultado fue estéril y el Almería, que aún está del todo por hacer, siguió deambulando sin rumbo por el partido. El Logroñés sobrevivió con la máxima comodidad y fue capaz de dar un par de avisos a Fernando con sendos remates de Siddiki y Leo Ruiz antes de que Andy, esta vez sí de forma legal, decidiera el partido en el 78’ tras una dejada perfecta de David González.
El gol, lejos de espolearle, terminó de hundir al Almería, que únicamente pisó el área de Miño en el descuento y llegó incluso a marcar, pero De la Fuente Ramos anuló el tanto de Sadiq porque se ayudó de la mano para acomodarse el balón. Las dudas crecen ostensiblemente en torno al equipo de José Gomes. Turki Al Sheikh ha vuelto a ser el animador del mercado en Segunda, pero su proyecto no alcanza la estabilidad y sigue sin transmitir confianza. Y el jeque no ha hecho gala de tener mucha paciencia desde que aterrizó en el club indálico.
Paciencia y sobre todo fe es lo que le sobra a este Logroñés, que concibe esta importante victoria como punto de inflexión en una campaña que conjuga al mismo tiempo la esperanza y la enorme exigencia de la categoría. Al frente, portando la bandera de la ilusión, está Andy, el primer héroe de la temporada en Las Gaunas.