El portero del Eibar fue el mejor del partido, e impidió la derrota guipuzcoana gracias a sus buenas paradas. Emre Mor, en dos ocasiones, y Nolito pudieron dar la victoria a su equipo.
Eibar y Celta empataron (0-0) en Ipurua el sábado en un partido en el que Marko Dmitrovic, portero azulgrana, frenó a un conjunto vigués más peligroso en ataque. Emre Mor, en dos ocasiones, y Nolito pudieron dar la victoria al equipo entrenado por Oscar García, que creó las mejores oportunidades. Guipuzcoanos y gallegos alzaron el telón de la liga de Primera División en la temporada 2020-2021 con un duelo flojo, en el que los eibarreses dirigidos por José Luis Mendilibar se mostraron muy ‘espesos’ ofensivamente. Los vigueses crearon más peligro, con Emre Mor como atacante destacado.
Dos meses después, Ipurua volvió a acoger un partido de fútbol con un minuto de silencio por el fallecimiento de Paco Marquiegui, expresidente del Eibar. Aunque comenzó una nueva competición, al igual que ocurrió al final de la campaña pasada, el duelo se disputó a puerta cerrada, sin aficionados, por el coronavirus. Al final, el número máximo de jugadores convocados fue de 23, en lugar de 25. Debutaron los fichajes azulgranas Kadzior y Recio, y los celestes Tapia y Baeza.
Los locales comenzaron con mucha intensidad, y Pedro León remató alto un centro de lujo de Sergi Enrich con el peso, en la primera ocasión del encuentro. Pero, como había anunciado Mendilibar, el partido iba a ser abierto y con muchas oportunidades de gol. El Celta respondió con un buen lanzamiento lejano de Nolito que Marko Dmitrovic despejó a córner en una buena intervención del portero serbio. El guardameta internacional con Serbia volvió a despejar un ‘uno contra uno’ con Emre Mor, cuando, de nuevo, se cantaba el gol celtiña. Antes de la primera media hora, Kike García cabeceó fuera un centro de Pedro León. Luego, el visitante Brais Méndez hizo lo más difícil (controlar un balón y dejarlo muerto), mientras que luego remató fuera un intento de vaselina. No hubo parón por hidratación, y debido al calor -había un sol radiante en una tarde veraniega- y al cansancio, el final de la primera parte fue infumable, porque a los futbolistas les pesaban las piernas.
La segunda mitad comenzó con un remate visitante, enviado fuera por Aidoo metió mal la pierna-, quien se la quitó a Nolito dentro del área. Pero quien estuvo a punto de marcar el gol de la jornada fue Pedro Bigas (el defensa mallorquín jugó ayer de lateral izquierdo), pero su impresionante volea se fue fuera por muy poco. El esférico iba de un área a otra, el celeste Nolito centró, Emre Mor remató, y paró Dmitrovic. El duelo no tenía dueño, por lo que Edu Expósito remató fuera desde el borde del área. Pero de nuevo Dmitrovic salvó al Eibar de la derrota, ya que primero despejó un disparo de Emre Mor tras buena jugada personal, y luego otro de Hugo Mallo. Los locales acabaron con uno menos por la expulsión de Pape Diop por doble amonestación (vio dos tarjetas en 6 minutos).